jueves, 25 de octubre de 2012

Comenzando...



"¿Alguna vez sintieron que no tenían ganas de nada? Ni de levantarse, ni de comer, ni de hablar por teléfono, ni de saludar a la familia, ni de hacer cosas que les den placer. Así me sentía yo"
(Cielo Latini, 2006, Abzurdah, Un clavo oxida otro clavo, pág 55.)

Este texto es una especie de sesión terapéutica. Intento contar mi depresiva historia, para después leerla. Para auto-analizarme. Sufro, pero sé que me ayudará. Pueden criticarme, juzgarme, tildarme de loca. En este espacio, critico mucho, o a muchos. Pero vivimos en un mundo donde hay libertad de expresión, por lo menos en mi mundo, y no quiero callarme. Es mi experiencia, mis vivencias, mis dolores, mis sentires. Es mi visión de mi realidad y mi mundo. Y lo expreso como tal, o sea, digo lo que quiero, de quien quiero, cuando quiero.

Si es verdad… Parezco una nena caprichosa que se cree que se las sabe todas… Pero no es así. Suelo “atacar” para protegerme. Si ataco primero, no me va a doler tanto recibir el golpe. Mentira. Pero bueno, otra de mis tontas creencias que arrastro desde pequeña.

 Quiero compartir mis vivencias con el mundo.  Durante seis años, quise conseguir un libro “parecido” a esto, es la catársis de alguien más. Hoy lo leo y me identifico con la autora en varias partes del mismo. Entonces pensé… Por qué no retomar ese proyecto de hace años y contar mi propia vida? Tengo imaginación, podría perfectamente escribir novelas (o cuentos como hace mucho tiempo hago) pero nada se expresa mejor que lo que uno vive en carne propia. Tal vez mi historia pueda ayudar a alguien más, como a mí me han ayudado algunos libros. Y así surgió esta idea.

Desconformes, depresivas, histéricas, anoréxicas, bulímicas… Hola! Bienvenidas! Tal vez esto pueda ayudarlas, si es que están dispuestas a leer sobre alguien que tocó (y toca) fondo. Y si esto no ayuda a nadie, o nadie es capaz de leerlo, o no entretiene una mierda, no interesa. A mí me entretiene escribirlo, y me ayuda, aunque duele recordar ciertas cosas. Ven? Otra vez sale a la luz la nena caprichosa, pero en verdad, mi niña interior se hace un rollito después de atacar…

En fin… Saco mis temores, miedos, tristezas y mis escasas alegrías a la luz. Salen de mi cabeza para vivir en un “papel” (Es un poco tonto eso de la vida en el papel, cuando nadie escribe en papel hoy día). La cuestión es que ahora son letras, palabras, párrafos;  tienen vida propia, por lo que salen de mi vida. Simplemente están a mi alcance, para cuando yo decida “verlos”.

Con 22 años, la depresión, la baja autoestima, la soledad y el miedo a la misma,  han sido mis fieles compañeros de vida desde una muy temprana y precoz adolescencia… Les debo todo lo que tengo y lo que soy, lo bueno y lo malo; lo malo y lo bueno. Les debo desde mi mayor tesoro, mi hija, hasta este tonto y absurdo cigarrillo que fumo al escribir.

Y así, comienza todo, o termina todo… Ya lo decidiré, o lo decidiremos junt@s...

1 comentario:

  1. Me encanto..quiero leer mas.. se que lo vas hacer y te va a salir genial.. es duro contar la historia de uno.. xro ayuda un monton.. QUIERO MAS!!!!!! jajajaja Mucho,xro mucho exitos.. Besos marian

    ResponderEliminar